Deuteronomio 7
El hecho de que el pueblo
de Israel había sido escogido por Dios, implicaba enormes bendiciones,
victorias contra sus enemigos con la ayuda del poder de Dios, y abundantes
promesas. Pero la santidad implica un costo, y este les estaba siendo recordado
por Dios para que se esforzaran en ello. Tenían que obedecer los mandatos, que
eran códigos de conducta, y exterminar a los pueblos paganos que Dios había
determinado castigar. De la misma forma, el ser hoy escogido por Dios y
apartado para sus propósitos implica un costo que se debe pagar, antes de
recibir tanta bendición como la que se reserva para los que caminan en su propósito.
Deuteronomio 8
Un recordatorio de tener
cuidado respecto a lo que está por presentarse en frente es muy importante. Y
en este caso Dios le advirtió a su pueblo, como nos lo advierte a nosotros, que
es necesario acordarse de donde nos sacó Dios aun en los tiempos de mayor
abundancia y bendición, ya que tendemos a olvidarnos de ellos.
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