Habacuc 1.
Es una oración de un hombre que no tiene todas las respuestas. Que ve la injusticia en su pueblo pero también está observando cómo los caldeos destruirán su nación. Hace preguntas genuinas porque le parece injusto o porque simplemente quiere entender lo que pasa. El ha escuchado las profecías de lo que ocurriría con seguridad, pero sigue analizando si es justo o no. ¿Te has sentido así?
Habacuc 2.
En unos cuantos versículos hay muchísima sabiduría. Un Habacuc que NO DORMIRA hasta que Dios le responda. Dios le muestra que le responderá una visión que debe escribirla, para que sea seguida. Y comienza con la declaración: “Aquel cuya alma no es recta, es arrogante; pero el justo vivirá por su fe.”
Lo siguiente es una descripción de las formas en que los hombres son injustos, el abuso del poder, el derramamiento de sangre y la idolatría existen entre los de Israel tanto como entre los Caldeos de ese tiempo. El principio antes mencionado aplica a todas las naciones “el justo por su fe vivirá”
Habacuc 3.
Habacuc conoce el poder soberano de Dios y ha entendido que su juicio viene contra toda impiedad. Este capítulo describe el poder de Dios sobre mares ríos, tierra, montes y prácticamente todo aquello en la naturaleza que el hombre no puede controlar. También describe como Dios viene con ese poder a destruir a muchas naciones impías. Pero Habacuc termina creyendo en la palabra de esperanza de Dios para los justos, y por lo tanto declara una alabanza incondicional a Dios.
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