1 Corintios 1.
Pablo se dirige a una Iglesia que el fundo, que tuvo obstáculos de todo tipo para establecerse, pero que Dios aun así estableció. En ella han sido derramados todos los dones con los que la iglesia contaba, pero pablo le da mayor énfasis a otra cosas. El poder de Jesucristo para santificar y escogernos para sus propósitos. El tipo de unidad del cual el habla es una unidad en cuanto al mover de Dios, una unidad en moverse hacia la misma dirección partiendo con pensar lo que Dios quiere que piensen y entonces hablar entre sí de ello. Que el centro de todo lo que hablen sea Cristo, y Cristo crucificado. Este aspecto común debe ser suficiente para mantenerlos en armonía. Para los de Corinto y para nosotros se hace un recordatorio. Somos lo vil y menospreciado del mundo y si sabemos algo es por Dios y la gloria es suya. Es de esta manera que nos ubicamos y no creemos que aquello de lo cual más pensamos o la enseñanza que tenemos en nuestra mente es la verdad única y la forma en que se deben de hacer las cosas.
1 Corintios 2.
No hay otra cosa que Cristo crucificado como mensaje para salvación. El poder de Dios respaldando el mensaje y no la sabiduría humana debe ser la esencia de nuestro mensaje. ES difícil porque requiere de comunión con Dios, de obediencia al Espíritu. Y lo que podemos ensenar de sabiduría debe de provenir de lo que el Espíritu nos ensena no de nuestras propias argumentaciones, no a través de métodos de conocimiento de hombres sino del discernimiento espiritual. Esas cosas de sabiduría de Dios deben ser habladas con los maduraos espirituales. Y te preguntaras Quienes son maduros espirituales? El siguiente capítulo habla del cómo actúan los maduros para que podamos identificarlos. Tal cosa es una locura para los que no tienen el Espíritu de Dios habitando en ellos.
1 Corintios 3.
Es un verdadero desafío vivir en el Espíritu y ser maduro. Los carnales tienen celos contiendas y algunas otras cosas que no parecen “tan malas” pero que se ponen en el rango de la carnalidad de todos modos. Es por esa conducta carnal que alguien se descalifica para recibir enseñanzas de la sabiduría de Dios. El pelar por de quien como discípulos o quién es nuestro padre espiritual demuestra carnalidad según Pablo. Lo más desafiante es en relación a los que servimos y como debemos construir en la gente lo que vale la pena, cosas que brindan lo necesario para la madurez. Porque de no ser así nuestra obra será reprobada y sufriremos perdida. Es más debemos de entender que todo proviene y es de Dios (sabiduría y entendimiento) y que por lo tanto no debemos pensar que somos sabios, al parecer en un sentido de superioridad sobre otros.
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