jueves, noviembre 10, 2011

Hechos 24-26 Pablo dando las buenas noticias a autoridades.

Hechos 24.
Después de llevar a Pablo a Félix Ananías, el sumo sacerdote y Tertulo tratan de presentar supuestos cargos contra Pablo. Pablo en su defensa declara varias cosas importantes, que el estaba realizando una tradición judía, que no se encontraba causando ningún disturbio y que los que lo tomaron no estaban ahí para acusarle. Además declaro que en el tribunal anterior no se le había encontrado culpable. Sus oponentes no tenían más que palabras que no podían probar. Félix posterga un veredicto por 2 años y para congraciarse con los judíos deja a Pablo en la cárcel ahí en Cesárea ahora bajo custodia de su sucesor, Festo. En este tiempo estuvo Pablo usando su tiempo para escribir bajo la inspiración del Espíritu a las Iglesias.
Hechos 25.
Festo se fue a Jerusalén a solo 3 días de haber tomado el cargo. Tan pronto como eso los judíos quieren que Pablo les sea enviado pensando matarlo en el camino. Vemos a Dios obrando para sus propósitos en todo lo necesario cuando Festo les dice que si tienen algo contra el vengan a Cesárea a presentar cargos. En su comparecencia Pablo se declaro inocente de los cargos. Festo como un gobernante más que quería complacer a los judíos le pregunta a Pablo si quiere ir a Jerusalén. El se negó por estar ante la autoridad competente. Que importante es saber cómo funciona el sistema “judicial” del mundo. Pablo sobrevivió en buena parte por ese conocimiento. De esta forma Pablo apelo a Cesar con quien ahora tendira que ser llevado. Sin embargo ante la visita de Agripa Festo busca un consejo para escribir el caso a Cesar antes de presentar a Pablo.
Hechos 26.
Una vez ante Agripa Pablo hace su introducción respetuosamente. El menciona que Agripa era conocedor de costumbres y controversias judías. Así que hablo de su formación como judío fariseo, de su tiempo persiguiendo a los Santos y consintiendo en su muerte, así como de su conversión, cuando Jesús le resplandeció y hablo.
Prosiguió explicando acerca de su llamado a compartir acerca del arrepentimiento tanto a judíos como a gentiles. Cuando termino Fasto le dijo que se había vuelto loco, Y Agripa que casi le convence de hacerse cristiano. Pablo le declara que cuanto oraba para que se convirtieran todos ahí. Al irse de ahí estas autoridades hablaban de cómo Pablo no había hecho nada digno de muerte, pero que Festo le mandaba a Cesar puesto que había apelado.

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