lunes, octubre 17, 2011

Lucas 3-6. El desafio del evangelio.

Lucas 3.
Herodes tetrarca era solo uno de los 5 gobernantes mencionados al principio del capítulo, lo cual nos muestra que Lucas cuida los detalles históricos para su debida comprobación. Este Herodes fue una persona más que fue reprendida por Juan el bautista quien no solo llamaba a arrepentirse sino que daba respuesta a sus preguntas acerca de cómo mostrar arrepentimiento.
Jesús vino al bautismo y tal acto de obediencia desato la complacencia de Dios quien públicamente lo respalda con la manifestación de su Espíritu y las palabras. Este es mi hijo amado en quien me complazco.
La genealogía de José es dada, y nos dice el escritor que se creía era el padre de José. Lo dice así porque él sabía que era concebido del Espíritu Santo. Y al final de la genealogía termina con Adán quien fue creado por Dios. Esta convicción nunca estuvo en juego entre los creyentes de la época.
Lucas 4.
Jesús es tentado justo después de la manifestación poderosa de que Dios estaba de su lado. ¿Te identificas con ello? Jesús respondió con la palabra de tal manera que el diablo se alejo “por un tiempo”.
Aquí se menciona que lo primero que caracterizo el ministerio de Jesús fue la enseñanza. En esta temprana etapa de su ministerio de “destapa” al leer en los profetas la cita que definía porque estaba ahí: Libertad a los cautivos, vista a los ciegos, buenas noticias a los pobres, y proclamación del ano del Señor. Ante la gracia de sus palabras ponían atención, pero ante la reprensión por su incredulidad en alguien de su propio pueblo se enojaron y lo querían matar. En Galilea fue mejor aceptado que en su tierra de Nazaret. Ahí predico con autoridad y libero endemoniados, estas dos cosas causaban una combinación de asombro y temor en los testigos.
Jesús sano a la suegra de Simón en donde muchos se juntaron para la tarde buscando ser sanados. El los sanaba a todos y nunca perdió de vista el enfoque, predicar en toda la región. No se asentó en un lugar sino que recorrió las ciudades para predicar.

Lucas 5.
Lucas nos ilustra muy bien cómo fue que Pedro, así como su hermano, además de Jacobo y Juan se unen al ministerio de Jesús. Es después de que Jesús usa la barca de Simón y al terminar les guío a una pesca milagrosa que aseguraba financieramente a su familia por un buen periodo de tiempo. El señor cuidaba de esas cosas. Los milagros continúan y se nos relatan algunos por la enseñanza que dejan, por ejemplo el leproso declaro “si quieres puedes limpiarme” “el paralitico que fue llevado por sus amigos al frente haciendo un hoyo en el techo demostró su fe. Y la declaración de Jesús de que tenia poder para perdonar pecados cimbro a todos los religiosos. Sin embargo El señor siempre buscaba apartarse para tener oración y comunión con el Padre.
Después de que Jesús llama a Levi, va a su casa y como lo había hecho en la casa de Simón comparte a todos los conocidos e invitados de Levi. Parece ser una estrategia de Jesús.
La pregunto acerca del ayuno echa por los religiosos, permite a Jesús darnos una enseñanza. Lo relativo a los odres nuevos y viejos tiene que ver con la disposición a lo nuevo que
Dios quiere hacer, con cambiar todo lo que sea necesario, y el gusto por el vino viejo y la resistencia a querer el nuevo habla de la resistencia al cambio. ¿Te identificas con alguna de estas dos cosas? Pídele a Dios que te ayude.
Lucas 6.
Lo que más les molestaba a los escribas y fariseos, era que Jesús no hiciera caso de sus interpretaciones de la ley. Los discípulos de Jesús llegaron a recoger espigas en un día de reposo (prohibido por ellos ya que era reposo absoluto sin excepciones); El Señor sano enfermos en el día de reposo, y todo esto les enfurecía.
Antes de llamar a sus discípulos Jesús paso toda la noche ORANDO. Esto es un ejemplo de cómo debemos consultar acerca de nuestras relaciones con otros. Después continúo Jesús sanando enfermos y predicando su mensaje. Uno de sus mensajes esta excelentemente contemplado por Lucas. Son las bienaventuranzas seguidas por los Ayes. Los que tienen hambre serán saciados, los que se sienten llenos tendrán hambre. En buena parte es en un sentido espiritual. EL que se siente bien un día reconocerá su vacio. Los pobres, los que lloran y los que sufren todo tipo de persecución o rechazo tendrán una recompensa de parte de Dios.
Tanto eso como lo relativo a que si a todos les agradas probablemente estés mal, pero si eres rechazado por el nombre del Señor serás bendito suena muy difícil. Pero el Señor no se detuvo ahí, nos insta a orar por los que nos dañan, amar a nuestros enemigos y muchas otras cosas más difíciles de hacer. ¿Todavía piensas que el cristianismo es para los viejitos? A mí me retumbo en el cerebro “ser benignos con los ingratos”.
Dice también: “con la medida con que miden serán medidos”. Lo cual implica no solo calidad sino también cantidad. Solo el que termina el aprendizaje será como su maestro.
Jesús nos ensena que un árbol es por su fruto, es decir alguien puede decirse ser algo pero su fruto lo delatara, particularmente lo que hable porque sale de su corazón.
El decir Señor Señor no nos hace seguidores firmes de Jesús, es el que escucha lo que dijo el Señor y lo pone por obra el que es una casa firme.

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